Los cumplidos funcionaron, y encontré sitio para dormir en el hostal/bar/restaurante Arenas, en la plaza del pueblo (al lado de la iglesia que, impresiónantamente, se ha trasladado, ladrillo por ladrillo, cuando se construyó el embalse, dejando el pueblo original debajo del agua). El sitio esta muy cómodo aunque me dieron un susto cuando baje a las 11 y pico para cenar. "La cocina esta cerrada", nunca suena bien, y peor cuando te informan que probablemente va a ser difícil encontrar algo ya en el pueblo. Y la situación ya es un desastre si acabas de caminar 40 kilómetros y a terminar has encontrado con dos ampollas parecidas a un par de globos bien hinchados. Necesitaba una cena en condiciones para reponerme y levantar el animo. Mis protestaciónes de "que?!, pero estamos en España!" no tenía ningún efecto.
La salvación la encontré en el bar Meson de Rodriguez, donde la dueña, con una cara muy sonriente, me dijo, "si todavía estamos abiertos hacemos lo que sea para ponerte algo". Un sandwich enorme de lomo y queso aparició enseguido, y eso, con una jarra de Estrella Galicia, y te digo que ningún rey ha cenado mejor, nunca.
Después de cenar, mirando los mapas para la ruta de hoy, y con los gallegos charlando en su idioma musical en el fondo fui directamente, directamente a la cama para dormir 9 horas a un tiro.
Ahora estoy desayunando en el bar del hotel, lleno de peregrinos de bici, casi listo para irme. Hoy me toca sólo 23 km hasta Sarria, que es casi un día de descanso. Antes de coger la ruta voy a comprarme Interviu, porque una amiga me llamo esta mañana para decir que el servidor sale en sus páginas, a ver, a ver.
Buen día a todos!
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